¿Qué es?
Bolivia 2022 es una iniciativa futbolística privada de la Fundación Gol Bolivia, presidida por Jordi Chaparro, enfocado fundamentalmente en las divisiones menores. Se trata de un proyecto de responsabilidad social empresarial, sin ánimo de lucro. Es un proyecto mediante el cuál Jordi Chaparro quiere devolverle al país todo lo que Bolivia le ha dado como empresario.
Los principales objetivos que persigue Bolivia 2022 son:
- Formar nuevos talentos futbolísticos para el país
- Aportar jugadores a las distintas categorías de la Selección Boliviana
- Capacitar a técnicos que trabajan en divisiones menores
- Organizar torneos y demás actividades que permitan aportar nuestro granito de arena en el desarrollo de las divisiones menores en Bolivia.
¿Cuándo y por qué nació este proyecto?
El contexto que vivía Bolivia, en términos futbolísticos, era bastante desolador: inversión mínima por parte de clubes y/o federaciones en divisiones menores, escasez de nuevas promesas bolivianas y pésimos resultados deportivos en los últimos. Era evidente, que el proyecto Bolivia 2022 era algo necesario para el país: no sólo para formar nuevos talentos sino también para evidenciar que la parte fundamental en cualquier proceso formativo debe partir de las divisiones menores y que, con paciencia, da resultados a medio-largo plazo.
El nombre de Bolivia 2022 fue elegido por dos factores fundamentalmente: en primer lugar, porque se querría mostrar que para cualquier proceso de formación de nuevos talentos se requiere tiempo, es decir, es a largo plazo; y en segundo lugar porque ese año coincide con la disputa del Mundial de Qatar 2022 y querríamos que para ese año ya hubiéramos promovido jugadores a clubes profesionales. Sin embargo, lo que quedaba claro es que el Proyecto Bolivia 2022 no terminaría el año 2020, sinó que tendría continuidad muchos años más.
¿Cómo ha evolucionado Bolivia 2022 desde sus inicios hasta la actualidad?
Bolivia 2022 dio sus primeros pasos oficiales a mediados del año 2015, periodo en el cuál se recorrió el eje troncal (Santa Cruz – Cochabamba – La Paz) para dar a conocer el proyecto a la opinión pública. De este modo fue que el día oficial del nacimiento del Proyecto Bolivia 2022 se remonta al 1 de Agosto del año 2015. Bolivia 2022 fue recibido con muchos aplausos viendo que podría ser la nueva esperanza del país para formar talentos de primer nivel y posicionar Bolivia donde realmente se merece en el ranking mundial; y por otro lado estaba presente el miedo de muchos clubes e institución que veían amenazado su futuro competitivo en divisiones menores debido a todo lo que nosotros apuntábamos y ofrecíamos.
Las primeras actividades realizadas fueron dictar cursos de capacitación a entrenadores en los 9 departamentos de Bolivia (Agosto 2015 – Diciembre 2015) y, posteriormente, recorrer todo el país para buscar los jugadores más talentosos de Bolivia (Enero 2016 – Octubre 2016) mediante la organización de campamentos de fútbol. Durante los últimos dos meses de dicho año, se convocaron a los 300 jugadores más talentosos que se habían observados para que fueran parte de un campamento final, celebrado en Santa Cruz, y del cuál se eligieron a los 150 chicos que finalmente serían parte del Proyecto Bolivia 2022.
Paralelamente, ese mismo año, hicimos los dos primeros viajes internacionales: participamos en el Mundialito de Portugal en el mes de Abril y en el mes de Julio viajamos a Brasil (Saô Paulo y Rio de Janeiro) para disputar una gira de partidos internacionales ante los principales clubes profesionales de ese país. En ambos eventos participamos con la categoría 2004, después de hacer una selección de los 12 mejores jugadores bolivianos que habíamos detectado.
En enero del año 2017 se inició la Academia Élite, con los 150 chicos que habían sido elegidos del campamento final, los cuáles conformaron todos los equipos (desde la sub-7 hasta la sub-15). Dentro de este grupo de jugadores, había 40 chicos que procedían de otros departamentos y que estuvieron en una residencia a lo largo de todo el año, cuidando minuciosamente su alimentación, estudios y estadía. Fue un año complicado ya que no pudimos competir en el campeonato regular de la ACF (Asociación Cruceña de Fútbol) debido a la presión que ciertos clubes ejecutaron sobre dicha institución, la cuál está afiliada y forma parte de la Federación Boliviana de Fútbol.
Ante esta situación, tomamos la decisión de organizar nuestro propio campeonato (Copa Cine Center Divisiones Menores) en las categorías Sub7, Sub9, Sub11, Sub13, Sub15 y Sub17. El resultado fue excelente, ya que un total de 72 equipos fueron parte de dicho torneo, además que nuestros equipos pudieron tener la opción de competir cada fin de semana de manera regular. Algo que es fundamental en cualquier proceso formativo: la competencia.
A nivel de competencias nacionales e internacionales, durante a lo largo del año 2017 viajamos a Chile, España, Perú y Tarija para que nuestros chicos tuvieron mayor competencia aún. En el primer viaje, que fue a Chile, nuestro equipo Sub-15 se proclamó subcampeón al perder en los penales ante Universidad Católica de Chile.
Posteriormente, en Abril viajamos a España con nuestras categorías 2004, 2005 y 2006 para participar en el Mundialito. Pudimos competir ante clubes como el Schalke 04 y Bayern de Munich de Alemania, ante la Juventus de Italia y el Athletic Club de Bilbao de España. Sin lugar a dudas, la experiencia fue excepcional y a nivel deportivo salimos muy contentos ya que pudimos clasificarnos para la Copa de Oro en las tres categorías. En el mes de Julio viajamos a Tarija (sur de Bolivia) con todas nuestras categorías de la Academia Élite (Sub7, Sub8, Sub9, Sub10, Sub11, Sub12, Sub13, Sub14 y Sub15). Fue una logística tremenda, pero a la vez una experiencia muy positiva y éxitosa, ya que salimos campeones en 6 de las 9 categorías, y en otra salimos subcampeones. Realmente fue un torneo en el que participaron muchos equipos de todo el país y se pudieron dar cuenta que Bolivia 2022 estaba entrando en el escenario con unos equipos muy competitivos y una organización muy profesional.
El siguiente viaje de ese año fue a Perú, con nuestra categoría 2003. El torneo se disputó en Lima y fue un gran viaje porque por primera vez nos proclamábamos campeones en un torneo Internacional. Todos los viajes no sólo generaban un paso adelante en su proceso deportivo, sino que a nivel cultural y social también era un gran impacto positivo para todos nuestros jugadores, los cuáles estaban viviendo experiencias que nunca habían tenido antes.
Hasta ese momento, y desde el inicio de Bolivia 2022, todos los jugadores siempre estuvieron becados al 100%, no debiendo cancelar nunca cuotas mensuales, ni para los viajes, ni indumentaria, ni tampoco los residentes debían cancelar monto alguno para la alimentación, traslados, alojamiento y educación. Todo era financiado por el grupo empresarial de Jordi Chaparro, el verdadero impulsor de dicha iniciativa.
Sin embargo, a finales del año 2017 el Proyecto Bolivia 2022 se vio obligado a reducir drásticamente su presupuesto por motivos económicos, lo que conllevaría que a partir del año 2018 algunos aspectos cambiaran sustancialmente: no habría chicos del interior en una residencia, todos los jugadores deberían aportar una cuota mensual, así como también cancelar parte de la indumentaria y también pagar parte de la cuota para los viajes nacionales e internacionales. Una decisión que fue dura de anunciar, pero a la vez también fue algo que permitió dar sostenibilidad económica a dicho ambicioso proyecto.
Después de cierta confusión, arrancó el año 2018. Sin jugadores del interior porque no teníamos presupuesto para una residencia y sin la continuidad de Raul Casado y Fermín Alonso, dos personas clave que habían estado presente desde el inicio del proyecto. Sin embargo, todos los demás jugadores que eran parte de la Academia Élite, siguieron con nosotros aún teniendo que aportar una cuota mensual, lo que mostraba el enorme compromiso que padres y jugadores tienen con Bolivia 2022. El año empezaba de manera titubeante, pero terminaría siendo un grandísimo año.
En Febrero viajamos nuevamente a Chile con la categoría 2002 para participar en el mismo torneo que habíamos disputado el año anterior. Esta vez sí que pudimos salir campeones después de derrotar a Deportes Iquique en la semifinal y golear a la Selección de Tacna en la final.
Ese año, además, pudimos finalmente habilitar nuestros jugadores para participar en el campeonato de la ACF, en el cuál salimos campeones en las categorías Sub9 y Sub15, además de ganar el torneo nacional CONMEBOL en la categoría Sub-13 después de una durísima fase final disputada en Potosí.
Con nuestros equipos más pequeños, desde la Sub7 hasta la Sub9, viajamos a Tarija y Yacuiba para competir en torneos nacionales con el fin de aumentar el roce.
En el mes de Agosto viajamos a Brasil con el fin de repetir el sistema de gira de partidos internacionales que habíamos realizado el año 2016. El resultado fue exepcional ya que, a parte de competir ante los principales clubes de dicho país, tres jugadores de nuestra institución fueron elegidos para hacer una prueba en el Santos FC debido a su talento. Miguel Angel Terceros, Enzo Monteiro y Christian Osinaga estuvieron a prueba durante unas semanas en el club brasileño y al final fueron aprobados, lo que significa que a partir de Enero del siguiente año serían parte de esta importante institución brasileña. Esa fue sin duda, el mejor premio que obtuvimos en todo el año, una inmensa noticia para los jugadores y para el proyecto Bolivia 2022.
Finalmente, en el mes de Noviembre también viajamos a Argentina con nuestros equipos 2007 y 2005, para participar en un importante campeonato argentino denominado Torneo Valesanito, en el cuál participaron clubes profesionales de toda Sudamérica.
También destacar que a inicios del año pusimos en marcha la Escuela de Fútbol de Bolivia 2022, debido a la gran cantidad de chicos que querrían unirse al Proyecto con la finalidad de poder ser parte algún día de la Academia Élite.
Además, también dimos continuidad a la Copa Cine Center Divisiones Menores que habíamos iniciado el año anterior, pero esta ocasión solo para las categorías Sub7, Sub9 y Sub11 con el fin de dotar mayor competencia a nuestros equipos de dichas edades.
De este modo, con un inicio de año titubeante, pero con un balance final espectacular, se puso punto final a ese 2018.
Empezamos el año 2019 altamente motivados por todo lo conseguido el año anterior. Fue un arranque de año espectacular ya que en el mes de Enero viajamos a Paraguay para participar en el Sudamericano Sub-13 de Clubes para representar a Bolivia, donde habíamos sido campeones en la fase nacional el año anterior. Participaron clubes del nivel de Olimpia, América de Cali, Independiente del Valle, Internacional de Porto Alegre, Independiente de Avellaneda… Un cartel de lujo, que nos posicionó en uno de los eventos de clubes más importantes en dicha categoría que se juegan en Sudamérica.
Al mes, en Febrero, nuestros equipos de categoría 2004, 2003 y 2002 se desplazaron a Chile para participar en un torneo y en una gira de partidos internacionales que nos permitió competir ante clubes de la talla como Universidad Católica, la U de Chile, Colo Colo… Sin duda, fue la mejor forma de preparación para llegar al máximo nivel en el torneo de la ACF.
Nuestros equipos más pequeños (categorías 2012, 2011 y 2010) viajaron a lo largo del año en Villa Montes, Cohabamba y Tarija para competir en dos torneos, además del campeonato de la ACF en el que compiten durante varios meses. Cabe destacar también que nuestra categoría 2010 participó en el torneo nacional de clubes, organizado por la FBF, después de proclamarse campeón en la fase departamental.
Al igual que el año anterior, nuevamente viajamos a Brasil con nuestros equipos de mayor edad (categorías 2005, 2004, 2003 y 2002) para participar en una gira internacional ante los principales clubes de Saô Paulo y Rio de Janeiro con el fin de repetir el mismo éxito. Verdaderamente dicho evento resultó otra vez brillante ya que dos jugadores de nuestra institución, Leonardo Zabala y Fernando Nava fueron fichados por el prestigioso club Palmeiras de Brasil. Sin embargo, además de ellos dos, hubo hasta seis jugadores más estuvieron a prueba en clubes profesionales brasileños por un mínimo de dos semanas, aunque lamentablemente al final no fueron aceptados. Sin lugar a dudas, la gran capacidad de exportar jugadores fuera del país que tiene Bolivia 2022 es una de los grandes alicientes y motivaciones para los chicos.
En el mes de Agosto nuestras categorías 2006 y 2010 viajaron a la Argentina para participar en el prestigioso torneo Sueño Celeste, en el cuál participan los mejores clubes de Sudamérica. El resultado fue exitoso ya que nuestra categoría 2010 se proclamó campeón de la copa Oro, obteniendo el tercer torneo internacional del Proyecto Bolivia 2022 en toda su historia.
En cuanto al torneo de la ACF se refiere, el resultado fue muy positivo y abrumador, saliendo campeón de la Copa Oro en las categorías Sub9, Sub11, Sub15, Sub17 y además consiguiendo el anhelado ascenso de la Primera de Ascenso a la Primera B. Realmente espectacular.
Es en este año 2019 cuando se produce uno de los hechos más relevantes del Proyecto Bolivia 2022: finalmente, después de muchos años de gestión e intentos fallidos, se llega a un acuerdo para disponer de un terreno de 3,5 hectáreas en la zona Este de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra para construir nuestro Centro de Alto Rendimiento. Una inversión de 800.000 dólares americanos, aproximadamente, que permitiría tener nuestro propio espacio (hasta ese momento íbamos usando canchas de otras instituciones) para formar de la mejor manera a nuestros jugadores. A mediados de año se anunciaba el acuerdo e inmediatamente se iniciaban las obras, las cuáles estaban previstas finalizar en el mes de Marzo del próximo año 2020.
Otro de los hechos más destacados de este año es la gran cantidad de chicos que promovimos a la Selección Boliviana: dos jugadores en la categoría Sub-17, quienes participaron en el Sudamericano Sub-17 disputado en Perú, y hasta ocho jugadores en la categoría Sub-15, quienes participaron en el Sudamericano Sub-15 disputado a finales de año en Paraguay. Sin duda, un auténtico logro, que aumentaba nuestra marca más alla del territorio boliviano.
Paralelamente, en cuanto a la Escuela de Fútbol que iniciamos el año anterior, siguió creciendo en número de jugadores, lo cuál nos llevó a tener dos sedes para atender la totalidad de chicos. En este sentido, también le dimos continuidad a la organización de la Copa Megacenter (antes denominada Copa Cine Center), la cuál nos permitió congregar muchos equipos de las categorías Sub7, Sub9 y Sub11.
Finalmente, y como mención especial, a inicios de año se tomó la determinación de administrar el Club Argentinos Juniors (de la Primera A, equivalente a la segunda división del fútbol boliviano) con el fin de poder promover nuestros mejores talentos a dicho club y así poder seguir con su progresión y poderse mostrar a los más altos niveles competitivos que ofrece el país. El resultado de dicha gestión ofreció dos caras: un primer inicio muy dubitativo en el cuál el equipo quedó último clasificado en la primera rueda y una segunda rueda en la que, después de varios movimientos de jugadores, nos proclamamos campeones. Sin embargo, en la fase final, no pudimos conseguir el cupo para jugar el torneo Nacional B, el cuál es el paso previo para ascender a la División Profesional. La experiencia de dicha administración fue interesante, aunque el ascenso de nuestro equipo de la Academia Élite a la Primera B nos hizo tomar la determinación de no administrar más este club para el próximo año.
Con muchos logros, y con la gran noticia de que arrancaríamos al año en nuestro CAR pusimos el punto y final a este exitoso 2019, el que más alegrías nos dio hasta ese momento en nuestra historia.
Arrancamos el año 2020 ilusionados con el estreno del Centro de Alto Rendimiento. Directivos, entrenadores, jugadores y padres habían estado esperando durante años esta infraestructura que al final ya podíamos disfrutar. Y la otra gran novedad es que nuevamente volvíamos a tener jugadores del interior, es decir de todo el país, ya que el CAR contaba con un amplio espacio para tener residentes. De este modo, 25 jugadores procedentes de distintas ciudades del país (muchos de los cuáles ya habían estado con nosotros el año 2017), ingresaron de nuevo al Proyecto Bolivia 2022.
Iniciamos el año con la participación a un famoso torneo de Brasil, la FAM Cup, con nuestro equipo 2004-2003 jugando ante clubes como Palmeiras, Corinthians, Red Bull y Gremio de Porto Alegre. El resultado a nivel deportivo no fue muy positivo, especialmente porque nuestro equipo era el más joven de todos, sin embargo, fue la mejor forma de preparación para lo que se avecinaba durante el año.
Nuestros equipos empezaron a entrenar por primera vez en el CAR a finales del mes de Enero. En la mañana entrena nuestro equipo de la Primera B, compuesto por nuestros jóvenes talentos y una mezcla de experiencia con el aporte de varios chicos de nivel, y por las tardes todos nuestros equipos de las divisiones menores. Paralelamente a esto, las obras del edificio del CAR iban avanzando y en un par de meses estarían definitivamente listas para su uso total.
Sin embargo, y por sorpresa de todo el mundo, llegó la pandemia del COVID-19, el conocido coronavirus, que nos obligó a poner una pausa a toda nuestra actividad desde mediados de Marzo hasta mitad del año 2020.